Horacio Calcaterra, el más destacado de ese gran colectivo en que se ha convertido Universitario en la recta final del Clausura, ha sido convocado a la selección.
El volante de 35 años ya había sido considerado por Ricardo Gareca, aunque solo jugó un partido oficial con la blanquirroja en las eliminatorias para Qatar, curiosamente ante Argentina, el país donde nació.
Si a la selección deben ir los mejores, el llamado del mediocampista es justísimo por donde se le mire.
Ante la ausencia de Rodrigo Ureña por lesión, Bustos le encargó la misión de convertirse en el volante ancla del equipo y cumplió el encargo con creces. Calca es quien maneja los tiempos de la crema: decide si hay que jugar corto o largo, hacia adelante o a los costados, si es necesario apurar o poner la pelota en el freezer. Es, como dirían mis colegas, “quien maneja los tiempos” de la ‘U’.
La pregunta obvia -y justa, también- es si podrá mantener ese nivel en la eliminatoria en caso sea requerido. La escasa intensidad con que se juega nuestro campeonato, el pésimo estado de la mayoría de los campos y las condiciones geográficas en que se desarrolla otorga diversas facilidades que luego nos pasan la factura en los encuentros internacionales. La U peleó en la última Libertadores, pero todo el plantel -incluyendo Calcalterra- sufrió por las diferencias en el nivel de juego. Habrá que verlo sobre el verde. Fossati lo conoce, por algo lo ha llamado.
Sobre lo que no hay dudas es respecto a la justicia detrás de su convocatoria. Horacio, se lo ganó.

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